La adolescencia es una etapa crucial en el desarrollo de las personas, un momento lleno de cambios y decisiones que afectan a los jóvenes para el futuro y también a sus familias.
Los adolescentes están en constante búsqueda de su identidad y expresión personal, básicamente están buscando su lugar en el mundo y, en esa búsqueda, la fotografía puede ser una herramienta poderosa que les ayude a encontrar su sitio y estimule su creatividad.
En este post he querido mencionar algunas de las estrategias efectivas que empleamos en nuestros cursos para inspirar a nuestros adolescentes a descubrir su potencial creativo a través de la fotografía y te pueden valer, tanto si eres docente como madre de familia con algún adolescente en casa.
Fomenta la Atención
La creatividad en la fotografía comienza con la observación. Uno de los problemas que, cualquier madre y padre está viendo en sus hijos y coincide con lo que expertas en la educación están constatando desde hace tiempo es que, con la llegada de los smartphone, nuestros jóvenes cada vez tienen más problemas para centrar su atención en clase o en la vida de normal.
Pienso que la fotografía, ya sea hecha con una cámara de fotos digital o con un teléfono móvil, es un medio excelente que les ayuda a focalizar su atención. En mis talleres, una de los ejercicios que hacemos es que los jóvenes y adolescentes aprenden a mirar su entorno sin hacer nada más que mirar, de una forma detenida y apreciando los detalles.
En estos ejercicios, les propongo ejercicios de observación como buscar patrones, contrastes, colores interesantes o texturas en su entorno más inmediato, incluso que se fijen de forma detenida en las cosas que ven todos los días y de forma rutinaria.
Esto les ayuda a desarrollar una mirada aguda y, porque no decirlo, a descubrir la belleza en lo cotidiano, además de ser una actividad que calma y relaja, que no viene mal.
Desarrollar un tema personal
Que a nuestros hijos solo les interesa lo que les interesa no es nada nuevo. Todos los que tenemos hijas adolescentes en casa ya lo sabemos. Pueden pasar olímpicamente de todo menos de lo que realmente les interesa. Y aquí la clave de la cuestión es dar con esa llave que abra la puerta de su interés. “Abre la puerta de su mundo digital” es el lema de la última campaña de la FAD. No se trata de su mundo digital, se trata de su mundo real, que les falta encontrar algo y por eso lo buscan en el mundo digital. Como padres/madres o tutores necesitamos acompañarlos en esa búsqueda de algo que les motive.
Pueden ser los videojuegos, la Rosalía, la moda, el fútbol o lo que sea pero si no encuentras ese tema al que atraer a tu hijo o hija, olvídate de pasar ratos con el o ella.
Busca ese tema o motiva a los jóvenes de tu clase a elegir temas que les interesen o que les provoquen emociones. La fotografía puede ser una forma poderosa de captar sus intereses, además de expresar sus pensamientos y sentimientos.
Si les permites fotografiar lo que les importa, estarás fomentando su creatividad de manera personal y significativa. Habrás dado con la clave de tener un motivo más de estar cerca de tu hijo/a y acompañándolo.
Experimentación y juego
La creatividad se nutre de la experimentación y la cámara de fotos o el móvil es una máquina de la experimentación y de jugar si te atreves.
Motiva a los jóvenes a que cojan la cámara y que prueben con la composición, estilos y técnicas. Pueden jugar con la luz, la velocidad de obturación, el enfoque, etc. Piensa en la cámara como un juguete y anímalos a que, sobre todo, jueguen mas que con el resultado.
La experimentación les permitirá descubrir formas de ver únicas y desarrollar sus habilidades.
Contar historias
La fotografía puede contar historias poderosas.
Un ejercicio que hacemos en clase es, utilizando fotografías de otras autoras, construir un relato encadenando algunas de esas imágenes. O, simplemente, escribiendo una historia acerca de una sola fotografía. Y es que la fotografía se presta a ello, dado su alta capacidad simbólica nos puede remitir a diversos significados con una sola foto.
En la práctica, otro ejercicio que hacemos, es hacer una series de fotos que transmitan un mensaje definido previamente. Dado que la fotografía nos permite a veces llegar más lejos que con las palabras, este ejercicio les ayuda a desarrollar habilidades de comunicación visual y creatividad narrativa.
Análisis Crítico
Fomenta la crítica constructiva desde la empatía, el respeto y, sobre todo, el cariño.
La mayoría de las veces, no nos gustan las críticas pero si éstas vienen desde la buena fe y con calorcito cariñoso seguro que las aceptamos de buena gana.
En nuestro taller de Una Mirada Personal, una parte importante del mismo, la dedicamos al análisis y crítica de fotos, tanto de otras autoras como de nuestras propias fotos.
Es un ejercicio fantástico revisar y discutir sus imágenes. Esto ayuda a los alumnos a reflexionar sobre su trabajo y a mejorar continuamente. Por otro lado y gracias una retroalimentación positiva y constructiva, estamos fomentando su crecimiento creativo.
Fuentes de Inspiración
Y siguiendo con el análisis crítico, éste lo empezamos analizando la obra de otros autores y autoras, referentes que les ayudan a concretar su mirada. Así, cada joven realiza un análisis crítico de sus fotos favoritas, explorando el trabajo de fotógrafas y fotógrafos famosos, así como otros artistas visuales.
La inspiración externa amplia su perspectiva y les abre nuevas formas de expresión y de inspiración.
Proyectos a medio y largo plazo
Una de las grandes cosas que les puede motivar a los jóvenes con la fotografía es desarrollar un pequeño proyectos fotográficos a medio/largo plazo. Pueden elegir el tema que más les interese o bien documentar un tema específico que se les proponga durante un plazo determinado.
Si el tema es interesante, os aseguro que se engancharán y más si al final de todo hay alguna recompensa como ver su proyecto materializado en, por ejemplo, una exposición colectiva o la edición de un fotolibro colaborativo.
Esta práctica fomentará valores como la paciencia, el compromiso y la constancia, por poner unos ejemplos.
Salidas Fotográficas
No hay taller que se precie en la que no pongamos en práctica lo aprendido con una buena salida fotográfica, en la que en compañía de todo el grupo, pasamos un rato divertido además de hacer un montón de fotos.
Son estas salidas momentos ideales para compartir la experiencia del grupo, romper las rutinas de clase y establecer nuevos lazos con otros compañeros a través de la fotografía.
Si organizas una salida fotográfica con tus hijos, la exploración de nuevos lugares y entornos puede ser una actividad familiar más interesantes que ir al Carrefour, además de estrechar vuestros vínculos compartiendo una pasión común por la fotografía.
En definitiva, la fotografía es una herramienta maravillosa para estimular la creatividad en todas las personas y, sobre todo, en jóvenes y adolescentes. Fomenta la atención, la experimentación, el discurso narrativo o contar historias y expresas emociones que, junto con la práctica constante, ayudará a los adolescentes a desarrollar sus habilidades creativas y a encontrar su voz única.
La creatividad es un viaje que puede durar toda la vida y la fotografía es una nave emocionante para explorarla.
¿A que esperas para lanzarte al mundo de la fotografía?
Nuestros talleres y actividades fotográficas para adolescentes
Los Colores de la Memoria
Un taller en el que a través de la intervención pictórica de las fotos del álbum familiar, reconstruimos los recuerdos en un proceso creativo y terapéutico.
Indentidad(es)
Un taller para que los adolescentes exploren quiénes son y quiénes son sus referentes para construir una identidad saludable en un momento tan crucial como la adolescencia
Una Mirada Personal
Un taller que ofrece las herramientas necesarias para que los jóvenes cuenten sus propias historias, expresar sus ideas y comunicar lo que piensan.